En esta visita por tierras de Ávila, al sur de Gredos y más concretamente en el término municipal de El Tiemblo, visitaremos los famosos Toros de Guisando y la Venta Juradera donde Isabel la Católica y su hermano Enrique IV firmaron el famoso tratado de Guisando.
¿Cómo llegar a los Toros de Guisando?
El recinto de los Toros de Guisando se encuentran a 5 km. de la localidad de San Martín de Valdeiglesias por la carretera M-501 y cogiendo el desvío hacia el Tiemblo / Ávila por la Av- 904 en el término de Castilla y León.
Pasado el cartel del desvío al » Cerro de Guisando » a pocos metros llegaremos al recinto de los toros.
Qué ver en los toros de Guisando
Una vez llegado al lugar, ya sea en coche o en autobús turístico, lo podremos dejar en un pequeño parking habilitado para la visita.
Previo pago y pasando la puerta principal nos encontramos con los cuatro verracos en granito mirando al cerro de Guisando.
Más de 2000 años de historia, hacen que los Toros de Guisando sean algo más que unas simples piedras talladas. Declarados bien de interés cultural con categoría de paisaje pintoresco fueron esculpidas en los s. II y I a.C. por el pueblo de los Vetones.
Son una representación escultórica de toros y cerdos en moles de granito, que debieron ser símbolos protectores del ganado colocados en esta zona de pastos frecuentados por los ganaderos vetones. Tras la conquista romana se convierten, en elementos funerarios ligados a la tradición.
Uno de ellos tiene una clara inscripción latina que pone: «Longinus Prisco – Calaet q Patri F.C.» que se traduce como: Longino se encargó de hacer este monumento para su padre Prisgo del clan de los Calaéticos.
Visita a la Venta juradera de los Toros de Guisando
Terminada nuestra visita a las moles esculpidas, seguimos por su derecha al fondo para encontrarnos con los restos de la Venta. En la actualidad no verás nada solo un panel informativo y la estructura de piedra de dicha venta. Según la leyenda fue mandada destruir por el Abad del monasterio situado en el cerro de Guisando ¡¡ Ah también visitable !!! por ser un lugar de perdición. Ver visita al Monasterio de San Jerónimo de Guisando
Por fuera en la calle podemos ver una inscripción en la tapia que explica la relevancia histórica de la misma: «En este lugar fue jurada Doña Isabel la Católica por Princesa legítima, heredera de los reinos de Castilla y León, el 19 de septiembre de 1468». En el interior queda un solar con los vestigios de lo que fue la venta.
Historia de la venta: En la Edad Media, a partir del año 1273, la constitución del Honrado Concejo de la Mesta por Alfonso X «El Sabio», otorgó privilegios muy importantes a este camino convirtiéndole en cañada real. Por el deberían transitar las ovejas merinas, cuya lana eran muy apreciadas en toda Europa. Como consecuencia a esto se edificó una venta que fue incorporada al cercano monasterio de Guisando en el siglo XV. La Venta ubicada a pies del camino permitía a los viajeros descansar y recibir avituallamiento.
El día 19 de Septiembre de 1468 se celebró un pacto trascendental en esta venta. En este pacto el Rey de Castilla Enrique IV nombraba heredera del trono a su hermana Isabel. Actualmente se la conoce como la Venta Juradera de los Toros de Guisando, pero solo quedan los cimientos, por la destrucción del lugar ordenado por el prior Fray Jerónimo de la Cruz, por ofender a Dios con lo que allí se cometía.
Tratado de los Toros de Guisando
La infanta Isabel de Castilla no estaba destinada a heredar el reino por ser hija de Juan II de Castilla e Isabel de Portugal, su segunda esposa. El heredero natural Enrique IV, hijo de su primer matrimonio.
Isabel y su hermano Alfonso se unen a una revuelta nobiliaria en 1465 para apartar del trono a Enrique IV y proclamar como nuevo rey a Alfonso. Al morir éste, Isabel buscó una concordia con su hermanastro Enrique. Esta reunión se celebró junto a los Toros de Guisando en 1468.
El Tratado acordado establece que Enrique IV continuaría siendo rey pero Isabel sería nombrada oficialmente como heredera a la Corona de Castilla, despojando de sus derechos a la hija de Enrique IV, Juana, llamada La Beltraneja.
Enrique IV culpó a Isabel de la ruptura del tratado, al no aceptar como consorte ninguno de los propuestos por determinados nobles de la corte, tal y como dictaba el pacto. Intentó entonces restaurar los derechos sucesorios de su hija Juana, comenzando una nueva guerra por el trono de Castilla.
¿Por qué en este lugar?
San Martín de Valdeiglesias ocupa una región valorada históricamente por su interés estratégico. Tradicionalmente ha sido un paso destacado entre las dos submesetas, funcionando como vía de comunicación. Desde época prerromana al menos dos caminos se cruzaban aquí. El primero de ellos transcurría 5 km. al suroeste del casco urbano de San Martín, conectando Ávila con Toledo, que posteriormente se convirtió en la Cañada Real Leonesa. La segunda vía, dirección Este-Oeste, adquirirá plena importancia en época medieval, cruzándose con el anterior a los pies del Cerro de Guisando. Este cruce de caminos era el lugar idóneo para a celebración del pacto, por ser uno de los más relevantes en la Edad Media.
Y con la visita a la venta Juradera damos por finalizada esta visita a los Toros de Guisando. Ahora os dejamos con los datos más prácticos de la visita.
Horarios de acceso a los Toros de Guisando
Horario de verano (16 de Octubre hasta el 14 de Abril)
Los tres primeros miércoles de cada mes y sábados, domingos y festivos del año: de 10:00 A 14:00 y 15.00 a 21:00.
Viernes: 15.00 a 21:00
Horario invierno (15 de Abril hasta el 15 de Octubre)
Los tres primeros miércoles de cada mes y sábados, domingos y festivos del año: de 10:00 a 14:00 y 15:00 a 18:00.
Viernes: 15:00 a 18:00
El resto de días y el 24,25 y 31 de diciembre y 1 de enero: Cerrado.
Precios de acceso a los Toros de Guisando
Entrada General: 2 € por adulto.
Entrada Gratuita: Niños menores de 14, Primer viernes de cada mes y los 3 primeros miércoles de cada mes.
Qué ver cerca de los Toros de Guisando
- A 5,9 km. se encuentra el Castillo de la Coracera de San Martín de Valdeiglesias (Madrid)
- A 21 km. se encuentra el Castillo de la Adrada (ávila)
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